Procesamiento profesional de piedra natural

Heinrich Hecker KG se decanta por dos MOBIREX MR 130 Z EVO2

Como empresa especializada en la industria del cemento, la gravilla y la piedra natural, Heinrich Hecker KG de Anröchte, en Renania del Norte-Westfalia, otorga gran importancia al uso de máquinas ultramodernas y de alto rendimiento. Esta empresa familiar ha decidido adquirir dos molinos de impacto móviles MOBIREX MR 130 Z EVO2 de Kleemann para utilizarlos en diversas canteras.

Heinrich Hecker KG fue fundada en los años cincuenta y cuenta con un parque de maquinaria de 100 vehículos e instalaciones diferentes. Hecker trabaja en el machaqueo de piedra natural desde 2011. Cuando se adjudicó el contrato para nuevos proyectos de extracción de material para la construcción de carreteras, la empresa decidió adquirir dos nuevas instalaciones de machaqueo. «Trabajamos en diferentes lugares y el rápido progreso de la excavación requiere una reubicación periódica de la instalación», afirma Nicole Menzel, jefa de servicios internos de Hecker KG. «Por esta razón, buscábamos un molino de impacto móvil que pudiera transportarse fácilmente y utilizarse de forma flexible. Después de estudiarlo detenidamente, nuestra elección fue el MR 130 Z EVO2». Gracias a que las paredes de la tolva son abatibles hidráulicamente, la instalación puede prepararse y cargarse en menos de una hora para transportarla.

Heinrich Hecker KG ha invertido en dos máquinas MOBIREX MR 130 Z EVO2 de Kleemann para reforzar su parque de máquinas y las utiliza para el procesamiento de piedra natural.

Las dos máquinas se utilizan actualmente en dos canteras para extraer andesita y diabasa. El desafío radica en la alta abrasividad del material de carga. Desde el principio, estaba claro que los barrones estarían sujetos a un alto desgaste. «En la extracción de piedra natural dura como la andesita, el cambio de los barrones se realiza después de 500 horas de funcionamiento», explica Nicole Menzel. Con el innovador sistema Lock & Turn, el cambio de los barrones se realiza de forma rápida y segura. Un sofisticado sistema de llaves garantiza que el usuario solo tenga acceso al rotor cuando se hayan completado todos los pasos de seguridad. De este modo, el rotor puede bloquearse de forma sencilla y segura en cualquier posición. Gracias a esto, los barrones pueden sustituirse en 45 minutos, lo que reduce los tiempos de inactividad de forma considerable.

En el procesamiento de andesita, el material de carga tiene un tamaño medio de 0 a 600 mm y se procesa hasta obtener un producto final de 0 a 45 mm, que se utiliza como capa portante en la construcción de carreteras. Para garantizar un alto rendimiento y una larga vida útil de las instalaciones utilizadas, Hecker realiza un mantenimiento diario de las machacadoras. De este modo, los cambios en las piezas de desgaste de las máquinas pueden detectarse y rectificarse a tiempo. El equipo de servicio técnico de Kleemann de la sucursal de Wirtgen Group en Windhagen acude de inmediato en caso de dificultades y garantiza la rápida disponibilidad de las piezas de repuesto.

También se utiliza un MR 130 Z EVO2 para la extracción de la diabasa. El material es menos abrasivo que la andesita, es más fácil de machacar y, por lo tanto, el cambio de los barrones solo es necesario transcurridas 1000 horas de funcionamiento. Según las necesidades del cliente, la instalación produce material de protección contra las heladas para su uso en la construcción de carreteras, p. ej., en tamaños de 0 a 32 o de 0 a 45 mm. Debido al alto contenido de finos, el MR 130 Z EVO2 resulta muy adecuado gracias a su precriba de cubierta doble, porque garantiza un precribado eficaz, lo cual reduce el desgaste y mejora la calidad del producto final.

Otra ventaja del MR 130 Z EVO2 es la rendija de machacado de ajuste continuo. Gracias al ajuste hidráulico, la rendija se puede adaptar durante el funcionamiento sin necesidad de largos períodos de inactividad. A medida que el flujo de material que pasa por la instalación se hace más ancho, la roca se puede procesar de forma más eficiente. También garantiza una mayor productividad el sistema de alimentación continua o CFS, que puede estrangular y volver a acelerar el transporte de material del alimentador vibrante y la precriba en función del nivel de llenado de la machacadora. Con esto, se garantiza un flujo óptimo de trituración del molino.